El tema de la jubilación suele ser muy duro para muchos de nuestros adultos mayores, llegar a los 65 es saber que no hay nada más que hacer que dedicarse a cuidar a los nietos, ver televisión, leer novelas, hacer ejercicios, entre otras actividades que suenan divertido al comienzo, pero a la larga llega a ser aterrorizante.
Las cosas suceden de distinta forma en otros lugares como podremos observar a continuación:
"De acuerdo con las investigaciones realizadas en EEUU, en los próximos 5 años aproximadamente 553000 residentes de Ohio serán mayores de 60 años, por lo tanto abandonarán la fuerza laboral; algunos de éstos tendrán el lujo de dedicarse a mantenerse activos, comprometidos y empleados más allá de la edad de jubilación, sin embargo, no todos corren con la misma suerte. Por otro lado, los residentes adultos mayores de este estado representan al grupo de mayor crecimiento de trabajadores, estudiantes y voluntarios, es decir, que el crecimiento de Ohio se debe a la participación activa de los ancianos en la comunidad. Esto es favorable, ya que ocasiona menos gastos en salud a nivel del estado".
Para lograr esto en el Perú debemos de quitar las barreras que aparecen para las personas jubiladas que desean trabajar. Los estereotipos creados en el ámbito laboral no colaboran con ellos al exponer que solo personas jóvenes y con nuevos conocimientos son capaces de realizar un trabajo de manera exitosa. Entonces, se debe modificar los modelos de negocio de manera que estos incluyan a adultos mayores trabajando en alguna área que vaya de acuerdo a sus capacidades. Se debe de encontrar ese apoyo, teniendo flexibilidad y brindando oportunidades a estas personas que lo merecen.
Del mismo modo, una escasa población adulta mayor se dedica a seguir estudios después de cumplir los 65, ya que la institución que la realiza es de entidad privada y los costos no están al alcance de todos. Pero más aún, no todos han acabado la escuela y pocos han seguido una educación superior.